Reproducción de «Mamelena, San Sebastián» de Sorolla
Hola a todos.
Hoy os traemos la reproducción que hemos pintados al óleo de una obra de Joaquín Sorolla, «Mamelena, San Sebastián».
Cuando nuestro cliente contactó con nosotros para encargar esta obra, tengo que reconocer que no la había visto nunca, y he visto muchos cuadros, incluso pensé que era un estudio.
Queremos mostrárosla, porque al igual que yo seguro que habrá gente que también desconoce esta obra, así que a disfrutarla.
Como siempre intentamos seguir los pasos que siguieron los artistas al pintar las obras originales. En este caso, pintó sobre un lienzo imprimado en tono gris, en vez del típico color crema o blanco.
Nosotros hemos pintado todo el lienzo con óleo gris-tierra bastante diluído y hemos esperado que seque para después dibujar y pintar.
Ya hemos comentado que no conocía esta obra y que al principio me pareció un estudio, que no sé si lo sería, quien sabe lo que tenía Sorolla en la cabeza, pero luego al ver la fecha de realización 1914, me di cuenta de que era de su etapa final, donde sus últimos lienzos, carecían totalmente de detalles, a la vez que utilizaba una pincelada gruesa y muy suelta.
Fijaros en el cuadro, en el barco central atrás va cargado de peces, un pescado que Sorolla crea con unas cuantas pinceladas de diferentes tonos claros, al igual que los pescadores dentro de los barcos, dos pinceladas largas.
Otra cosa que me llamó a atención es que cromáticamente basa la obra en una amplia gama de azules, desde los oscuros hasta los turquesas.
Hemos pintado esta reproducción con casi las medidas del original, 81 x104 cm.
Esperamos que la hayais disfrutado.
El cuadro original y Sorolla
Esta pintura forma parte de una serie de obras que Sorolla realizó durante sus estancias en San Sebastián, una ciudad que visitó regularmente a lo largo de más de tres décadas, desde 1889 hasta 1921.
«Mamelena, San Sebastián» es un óleo sobre lienzo que mide 81,5 x 104 cm.
Otros cuadros que Sorolla pintó en San Sebastián son:
- Después del baño, 1917.
- Playa de San Sebastián, 1912.
- Rompeolas, 1910.
- Sol y mar, 1912.
En estas obras, Sorolla logró plasmar con gran maestría las diferentes luces del norte de España, distintas a las de su Mediterráneo natal, los diversos estados del mar Cantábrico y la atmósfera característica de San Sebastián, a menudo nublada y húmeda.
La obra que hoy nos ocupa, es evidente que fue ejecutada con una gran soltura y rapidez.
Es una marina que se encuentra en la colección del Museo Sorolla en Madrid, donde se preserva como un valioso ejemplo del trabajo del artista durante sus estancias en la costa vasca.
0 comentarios